La prueba que evalúa la salud de tu oído medio en minutos
¿Alguna vez te han dicho que necesitas de una «timpanometría» y no has sabido muy bien qué es? Aquí te lo explicamos. La timpanometría, lejos de ser un examen complejo, es una prueba rápida, sencilla y sin dolor, extraordinariamente útil para detectar problemas que muchas veces pasan desapercibidos, como la presencia de líquido detrás del tímpano, tapones de cerumen, presión negativa o infecciones en el oído medio que afectan a la audición
¿Para quiénes está indicada esta prueba?
Esta prueba es una herramienta clave para diagnosticar diversas afecciones del oído, especialmente en niños y adultos que no pueden responder fácilmente a otras pruebas de audición. La timpanometría no mide la audición, sino el cómo responde el oído medio al sonido y a los cambios de presión.
¿Para qué sirve?
Esta prueba proporciona información vital que otras pruebas no pueden dar. Nos ayuda a detectar:
- Acumulación de líquido en el oído medio por (otitis media serosa), común en niños.
- Infecciones de oído (otitis media aguda).
- Perforaciones o cicatrices en el tímpano.
- Problemas en la cadena de huesecillos.
- Disfunción de la Trompa de Eustaquio (ese canal que equilibra la presión cuando bostezas o viajas en avión).
¿Cómo se realiza?
- El especialista colocará suavemente una pequeña punta de goma en la entrada de tu oído.
- Este dispositivo emitirá un sonido suave y creará pequeños cambios de presión de aire (como un leve susurro o un cambio de altitud muy suave).
- La sonda mide cómo rebota el sonido en tu tímpano bajo estas diferentes presiones.
- Una máquina registra los resultados en un gráfico llamado timpanograma.
- Durante la prueba lo único que debes hacer es permanecer inmóvil.